Indudablemente las Pymes nos encontramos en una situación sin igual, que se modifica casi a diario, con pronósticos que no se cumplen, sin embargo, contamos con muchas información y herramientas a nuestro favor para sortear y enfrentar adversidades en lo que será un 2021 económicamente complicado.
Muchos de los desafíos no son nuevos, esta pandemia dejo al descubierto finanzas débiles o hasta inexistentes, estructuras administrativas sin liderazgo, nos mostró que muchas empresas estaban en un estado de confort que con o sin crisis la iban a pasar muy mal en próximos años, pero de igual forma nos hizo descubrir áreas de oportunidad, darle un giro a nuestra empresa, reinventarnos y hasta en el mejor de los casos tener una rebanada más grande del pastel.
El papel de las Pymes en la recuperación económica del país es esencial, son las que generan el mayor numero de empleos, son flexibles y tienen una capacidad de adaptación sorprendente, por lo cual es una oportunidad reforzada para salir adelante a esta situación, aun que los retos sin duda son números, hemos identificado 4 retos clave que deberán afrontar para logra una pronta recuperación.
Adaptación a la nueva realidad.
Las restricciones tomadas por el gobierno sin importar que sean de forma anticipada o demasiado tarde, como el confinamiento, el cierre de sectores no indispensables y sobre todo regir nuestra vida con el color de semáforo epidemiológico, afectan de manera directa a las pymes, las lleva a adaptar su logística, su personal y sus productos o servicios a las medidas restrictivas para salvaguardar la salud. Nos obliga a salir de nuestro estado de confort, de buscar nuevas alternativas, que nos permitan sostener los precios y la calidad que nos mantendrá dentro del mercado, aun sobre la competencia desleal que se disparó para muchos sectores.
En casos singulares se generó mayor productividad, al generar más con menos, que es lo que deberíamos de hacer la mayoría, la adaptabilidad del personal a trabajar vía remota les permitió identificar reprocesos y aplicación de horas hombre que no eran necesarias, la lluvia de ideas dentro del personal de las distintas áreas ayudo a modificar los procesos, organigramas, logística, optimización de tiempos y recursos, además la recuperación a la crisis puede convertirse en una oportunidad para establecer nuevos modelos de negocio, más productivos, competitivos, sostenibles y rentables, a adaptarse.
Implementación de nuevas tecnologías y potenciar la digitalización.
La misma necesidad y la crisis nos hizo brincar a la tecnología, que de alguna forma muchas empresas habían ido implementando, pero algunas se reusaban a dar el paso completo a una plataforma digital o tener procesos totalmente automatizados, el miedo a la tecnología siempre ha existido en las pymes, con argumentos de “siempre se ha hecho así”, “es muy cara” y un gran etcétera. Nos dimos cuenta de que invertir en tecnología e innovar se volvió indispensable para poder seguir en el mercado.
La implementación de tecnología va de la mano con la capacitación de los colaboradores, de lo contrario cualquier sistema o software no servirá y se volverá una maquina de escribir mecánica, debidamente aplicada eleva la productividad para hacer frente y se adelanten a dar soluciones. Desde años atrás se trataba de un reto para las Pymes, pero en la actual situación cobro relevancia, la digitalización es clave en estos momentos, en que millones de personas están confinadas en sus hogares a trabajar y donde el comercio electrónico en todos los sectores ha tomado un impulso impresionante.
Reto financiero.
El entorno financiero dentro de las pymes siempre ha sido puesto en segundo lugar y en algunos casos hasta el final, la actual crisis evidencio la falta de control en las finanzas, análisis de costos, de margen de utilidad, de falta de presupuestos que dicha información permite ver hacia donde va la empresa y tomar decisiones adecuadas. Las Pymes que contaban con esta información actualizada les permitió conocer el panorama al que se enfrentarían y de cierta forma saber si aun era viable mantener el mismo modelo de negocio o hacia donde había que enfocar los esfuerzos para poder sobrevivir y a corto plazo volver a operar.
El tener las finanzas al día, conocerlas y analizarlas ha permitido a la mayoría de las Pymes tener permanencia en el mercado, esta pandemia nos mostró que una empresa que ofrecía un producto o servicio que era de primera necesidad, de calidad, innovador y hasta de buen precio, pero con unas malas finanzas, desapareció. Es buen momento para retomar las finanzas, conocer la rotación de inventario, si mi margen de utilidad bajo o subió, hacer un presupuesto de ingresos y gastos, pero sobre tono analizarlo mes a mes, sobre todo optimizar recursos, nos dimos cuenta de que teníamos gastos innecesarios, pagábamos servicios altos, que no era necesario la renta de tantos espacios, que tenemos clientes donde nunca lo pensamos, que se podían optimizar todo al máximo.
Aprovechar las tendencias y las necesidades del mercado.
La inigualable capacidad de adaptación de las Pymes al mercado les permite rehacer o hasta crear nuevas líneas de producción, comercialización y distribución de productos o servicios para satisfacer al mercado. Prueba de ello es como algunos sectores que fueron fuertemente afectados con las restricciones, el restaurantero, por ejemplo, modifico su modelo de negocio al grado que algunos están cerrando sus locales a pie de calle para dar lugar a cocinas industriales prestando servicio a domicilio, dejando de pagar rentas altas y adquiriendo su propio equipo de reparto, así como implementación de tecnología que les permita optimizar tiempos de entrega y mejorar su ganancia.
En la búsqueda de los nuevos nichos de negocio, la reinvención de las cadenas de valor son aspectos que llevaran a las Pymes al crecimiento y mejorar sus capacidades durante esta crisis, donde veremos muchos nuevos negocios y sobre todo áreas de oportunidad para emprendedores.
Sabemos que el camino aun es largo para volver alcanzar los niveles de ventas de años anteriores, esto relacionado con que la recuperación será repentina y desbalanceada, aun desconocemos los tiempos debido a que depende mucho de la vacunación masiva de la población mundial, pero cuando esto suceda la recuperación será inmediata, y la recuperación desbalanceada se debe a que primero se dará una recuperación en la demanda más no en la oferta, sin duda estos desbalances generan oportunidades de crecimiento para las Pymes así como para crear nuevos mercados e incluso oportunidades de ganancia.
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